El vuelo Boeing 787 de la aerolínea United Airlines, que despegó de Tel Aviv con destino a la ciudad estadounidense de Newark (Nueva Jersey), tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia este viernes en el aeropuerto internacional Stewart de Nueva York, después de que 22 pasajeros resultaran heridos por «turbulencias extremas», informaron medios locales.
En el vuelo viajaban 312 pasajeros, siete de los cuales fueron trasladados a un hospital con heridas leves, mientras que otros 15 fueron atendidos en el aeropuerto por los Servicios Médicos de Emergencia.
Según un comunicado de la Administración Federal de Aviación estadounidense, el vuelo pudo «aterrizar sin novedad, después de que la tripulación informara de la emergencia médica de un pasajero». Asimismo, se abrió una investigación para conocer los detalles del incidente.
El pasado jueves, el vuelo 990 de la misma aerolínea que cubría la ruta entre San Francisco y París, también tuvo que ser desviado a la ciudad de Denver, en el estado de Colorado, después de que la tripulación informara de «un problema con el motor».